
Según cita The Guardian, el investigador conoció directamente un caso cerca del aeropuerto de Newark, donde el conductor de un camión utilizaba un dispositivo adquirido online, para evitar el rastreo de sus jefes, casi siempre un mismo día de la semana. El caso merece un multa en EEUU de US$31 mil actualmente.
Parkinson opina que esa es una multa muy pequena, considerando el daño que puede ocasionar el bloqueo, y que hay que seguir el ejemplo de Australia, donde la multa supera los 800 mil dólares y 5 años de privación de libertad.
Debido a la distancia, las señales provenientes de los satélites GPS son sumamente débiles, y basta con un dispositivo de bajo costo emitiendo ruido en su frecuencia de operación para interrumpir la señal varios kilómetros a la redonda.
El experto también llama a los diseñadores de receptores a implementar medidas que dificulten el bloqueo, entre ellas usar redes múltiples como Glonass y Galileo y sistemas inerciales para mantener el posicionamiento durante la interrupción de la recepción.