El acuerdo alcanzado en la CMR-19 establece procedimientos reglamentarios para el despliegue de NGSO, incluidas las megaconstelaciones en órbita terrestre baja.
Bajo el régimen regulatorio recientemente adoptado, estos sistemas deberán desplegar el 10% de su constelación dentro de los 2 años posteriores al final del período regulatorio actual para su puesta en servicio, el 50% dentro de los 5 años y completar el despliegue dentro de los 7 años.
El enfoque basado en hitos proporcionará un mecanismo regulador para ayudar a garantizar que el Registro Internacional de Frecuencias Maestro refleje razonablemente el despliegue real de dichos sistemas satelitales NGSO en bandas y servicios de radiofrecuencia específicos.
También busca lograr un equilibrio entre la prevención del almacenamiento de espectro de radiofrecuencia, el funcionamiento adecuado de los mecanismos de coordinación y los requisitos operativos relacionados con el despliegue de sistemas NGSO.
Mientras los satélites en la tradicional órbita geoestacionaria están alineados con la rotación de la Tierra a una altitud de 36 mil km, los satélites no-geoestacionarios se mueven a través del cielo durante su órbita alrededor de la Tierra, en órbita terrestre media (MEO) 8 mil a 20 mil km sobre el tierra y en órbita terrestre baja (LEO) en elevaciones entre 400 y 2000 km.
La UIT ha recibido solicitudes de asignaciones de frecuencia a sistemas de satélite NGSO compuestos de cientos a miles de satélites desde 2011, en particular en las bandas de frecuencia asignadas al servicio fijo por satélite (FSS) o al servicio móvil por satélite (MSS).
La conferencia solicitó específicamente más estudios de la UIT sobre tolerancias para ciertas características orbitales de las estaciones espaciales NGSO de los servicios de satélite fijo, satélite móvil y satélite de radiodifusión, así como para el posible desarrollo de procedimientos posteriores al hito.
Más detalles en ITU.
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